Ubicado a tan solo 8 km al sur de Boca del Río, se encuentra el camino hacia un pequeño pueblo pesquero de nombre Mandinga; un hermoso lugar para pasar un día tranquilo y disfrutar de los paisajes, la música y la exquisita comida local. Lo primero que vas a poder apreciar es la hermosa laguna que te recibe al llegar, sin duda es una magnífica estampa para los visitantes que inmediatamente buscan obtener las mejores fotografías.
El paseo en lancha es uno de sus principales atractivos, durante el recorrido de aproximadamente una hora, podrás visitar algunos de los esteros como El Conchal, Horconos y El Mandinga, el cual desemboca en el mar; además podrás apreciar una gran variedad de aves que habitan despreocupadas en este lugar, entre las que destacan, las garzas, pelícanos, gaviotas, vencejos, patos, halcones y una gran cantidad de aves migratorias. Mientras disfrutas de este recorrido, sin darte cuenta te verás rodeado de una gran cantidad de plantas, son los manglares, que hacen que el paseo tome un auténtico estado de relajación.
En el camino de vuelta los pescadores te comparten sus técnicas para pescar camarones, ostiones y jaibas; pero eso no es todo, los lancheros hacen una parada en el banco natural de ostiones y ahí puedes probar las delicias que nos regalan estas aguas dulces; ellos ya están preparados con el limón, la sal y por supuesto la salsa picosita.
En Mandinga también puedes disfrutar de una gran cantidad de lugares para probar la exquisita comida local, es difícil poder escoger, sin embargo, algunos de los más concurridos son: “Típico de Mandinga”, “La Llegada del pescador” y “La cabaña de Tomás”; hay una gran variedad de platillos para degustar: el pescado relleno gratinado, la mojarra frita, filete endiablado, coctel de camarones y el insuperable arroz a la tumbada; mientras disfrutas de estos deliciosos manjares, los jaraneros alegrarán tu día con sus rimas y coplas, al más puro estilo jarocho.
Si no llevas prisa, lo ideal es ver caer el sol sobre la laguna, es un espectáculo simplemente increíble, paisajes que solo la naturaleza son capaces de crear. ¡Disfrútalo!
Fotografías: Erika Osorio
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