La ciudad de Quebec data de 1608 y conserva su núcleo colonial antiguo orgullosamente, la Place Royale y el puerto histórico; Vieux Port, conocido actualmente por su vida nocturna. Quebec es una provincia el este de Canadá en la que predomina el habla francesa.
Quebec, destino turístico de Canadá
La ciudad de Quebec es la cuna de la civilización francesa en América del Norte, una ciudad impresionantemente activa por el constante tráfico de los cruceros que llenan el horizonte del magnífico rio Saint Laurent, mientras la gente pasea alegremente a lo largo de las murallas, calles y callejones de esta parte antigua de la ciudad. En el invierno puedes disfrutar de las pistas de hielo o dar un paseo alpino por el famoso tobogán de hielo. Esta hermosa ciudad te llenará de energía con su arte, cultura y maravillas naturales.
Diversión invernal en Quebec
Quebec es una ciudad declarada patrimonio de la UNESCO, rodeada de hermosos paisajes, numerosos atractivos culturales y con una gastronomía renombrada que no puedes perderte. Si eres amante de la naturaleza te sugerimos ir al encantador Domaine de la Chute-Montmorency, una gran caída de 83m, 30 m más que las cataratas de Niágara y observar los enormes bloques de hielo que la rodean, toda una invitación a la relajación y los placeres de los sentidos. En teleférico las vistas sin simplemente espectaculares, también puedes utilizar el puente, desde el centro de Quebec puedes llegar vía el autobús 800, por 2 euros aproximadamente.
Chute-Montmorecy en invierno
La Basse Ville, es idónea para dar un paseo y perderse por sus calles, se ubica en la parte baja de la ciudad, en este lugar podrás encontrar innumerables tiendas y restaurantes, además del puerto y el Museo de la Civilización, un recinto donde conocerás la evolución que ha experimentado la ciudad y Canadá. Esta parte de la ciudad tiene un encanto similar al Viejo Quebec, por sus calles abundan los músicos callejeros y las galerías de arte.
La Basse Ville idónea para pasear, Quebec
El Parlamento construido a finales del siglo XIX, es un impresionante edificio que se ubica muy cerca de las murallas del casco antiguo de la ciudad. Su estilo arquitectónico, “segundo imperio”, fue muy popular en Estados Unidos y Europa en el momento en que se construyó. Está rodeado de numerosas estatuas de gente muy reconocida dentro de la ciudad y de Canadá.
Interior del Parlamento, Quebec
Fountaine de Tourny, frente al Parlamento es una fuente con una historia curiosa, estaba originalmente en la ciudad francesa de Burdeos, pero la administración decidió quitársela en 1960 ya que era muy caro mantenerla. Años más tarde, el propietario de unos grandes almacenes la compró, la hizo restaurar y la donó a la ciudad de Quebec para celebrar sus 400 años.
Fantaine de Tourny, con una curiosa historia
Château Frontenac, es uno de los edificios más espectaculares de Quebec. Este inmenso hotel ha sido protagonista en innumerables series o películas, además de hospedar a todas las grandes celebridades que visitan la ciudad. Se construyó encima de una colina, lo que lo hace todavía más impresionante. Fue financiado por una empresa de ferrocarriles en los últimos años del siglo XIX. Es uno de los hoteles más fotografiados del mundo, debido a su belleza y su clásico estilo de castillo francés.
Château Frontenac, clásico estilo francés
En el Barrio de Petit Champlain están ubicadas las tiendas y el comercio más antiguo de Norteamérica, muy cerca del Château Frontenac, por todas sus pequeñas calles se respira un gran ambiente. Podrás observar varios murales en los que visualizarás toda la historia de esta ciudad Canadiense. Podrás además, tomar fotos a lo largo de sus icónicas escaleras llamadas “rompe cuellos”, que han sido restauradas varias veces ya que son las más antiguas de Quebec.
Las icónicas escaleras "rompe cuellos"
La Porte St. Louis, es una de las puertas principales de entrada a la parte fortificada de Quebec, está perfectamente conservada y llama mucho la atención cómo al pasar por ella de un lado a otro, parece que estás en ciudades distintas. No te la pierdas de noche, está iluminada y sin duda son de las cosas que hay que ver en Quebec.
La Porte St. Louis, Quebec
La Isla de Orleans, está situada muy cerca del centro de Quebec y conocerla es como hacer un viaje en el tiempo. Tiene unas calles con tiendas medievales y restaurantes antiguos. Al pasear por esta isla te parecerá que has cambiado tanto de ciudad como de época. Es sin duda, una experiencia inolvidable.
Tienda de estilo medieval de la Isla de Orleans
La Universidad Laval es una de las más importantes de todo el país. Fundada a mediados del siglo XVII, por el primer obispo de Nueva Francia. En esta universidad han estudiado algunas de las personalidades más importantes de toda Canadá, saliendo varios ministros como antiguos alumnos. Este recinto tiene la particularidad de que da todas sus clases en francés, este requisito se toma al pie de la letra.
Universidad Laval del siglo XVII, Quebec
Catedral Notre Dame du Quebec, es una pequeña basílica que se ubica en el corazón de Quebec, es la más antigua de Canadá y Estados Unidos. Su altar dorado es precioso y bien merece visitarla. Una curiosidad es que se construyó originalmente en 1647, pero ha sido destruida dos veces: durante el asedio de Quebec en 1759 y un desafortunado incendio en 1992.
Catedral de Notre Dame en Quebec
Place Royale, fue el corazón de Quebec. Allí Samuel de Champlain fundó la ciudad en 1608, después de montar un pequeño puesto comercial justamente en esta placita. A un lado se encuentra Notre-Dame-des-Victoires, la iglesia de piedra más antigua de Norteamérica. Al otro lado podrás ver casitas tradicionales francesas, hechas de piedra, con grandes chimeneas y tejados de colores. Es algo que ver en Quebec para trasladarse de un plumazo al pasado.
Place Royale, Quebec
La Maison de la Littérature, es una visita cultural imprescindible y sorprendente que ver en Quebec es esta antigua iglesia reconvertida en biblioteca. El exterior corresponde a la primera iglesia de estilo gótico construida en la ciudad en 1848. Pero al entrar quedarás alucinado con la modernidad del espacio. El mobiliario blanco y minimalista contrasta totalmente con la fachada de un edificio religioso que cayó en desuso en 1931.
La Maison de la Littérature, Quebec
La ciudad de Quebec te invita a conocerla.
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