Enclavado en la parte central del Estado de México, Temoaya se distingue por las nítidas huellas culturales particularmente las del pueblo Otomí, a través de sus manifestaciones artísticas, artesanales y espirituales.
Lo primero que tienes que hacer es empacar ropa de frío ya que su clima es muy fresco todo el año. La ciudad más cercana a Temoaya es Toluca capital del Estado de México. La palabra Temoaya significa “lugar donde se desciende" o “cuesta abajo” en lengua Náhuatl. Una de las atracciones es la confección de tapetes de lana en telares de madera que ingeniosamente son manejados por los tejedoras locales, hasta 4 tejedores son necesarios para elaborar un tapete de gran formato.
Durante el proceso de elaboración de estas obras de arte popular, el dibujo va apareciendo como por un hechizo indígena. Posicionan el hilo en el antiguo telar de madera, anudan, aprietan y emparejan con un pequeño mazo, sin perder precisión ni arriesgar la belleza de su obra.
Otras atracciones son sus iglesias, los temazcales, sus paisajes boscosos y su maravilloso Centro Ceremonial Otomí, una referencia de la arquitectura nacional de espíritu indigenista logrado por los arquitectos Iker Larrauri y Carlos Obregón. En el lugar hay 365 escaleras que representan los días de año. En las primeras se puede observar la estatua conocida como “El Coloso”, que personifica al fuego que lucha por no extinguirse. Luego encontrarás un mural llamado “Da´Mishi”, el jaguar que camina y habla, en el que se plasman las diferentes facetas de la cultura Otomí.
En la explanada existen 52 serpientes que representan los 52 años que componen un siglo Otomí, en el piso de la explanada se encuentran tres lenguas de fuego rodeadas por una serpiente que se muerde así misma lo cual significa que todo encierra una historia. Por último verás 12 conos que son los 12 meses del año y una gran piedra en medio de ellos que es “El HyadIÏ “, o Nuevo Sol. Una maravilla que hay que visitar; Existe un pequeño museo donde se muestran los usos y costumbres de esta etnia.
Según la cosmovisión de los antiguos pueblos mesoamericanos, desde su creación la tierra ha sido calentada por 5 soles. El Códice Vaticano refiere que, el primer sol de la mitología mexica fue Tezcatlipoca, que fue derribado del cielo por Quetzalcóatl de un bastonazo, convirtiéndose éste en el segundo sol. Al ser derribado Tezcatlipoca cayó al agua y se convirtió en jaguar, vengándose de Quetzalcóatl 676 años después, propinándole una patada, vacío el poder aprovecho Tláloc para erigirse en tercer sol. Tláloc alumbró al mundo 364 años, hasta que Quetzalcóatl, que estaba al acecho, lo derribó para encumbrar como cuarto sol a Chalchiuhtlicue, esposa del astro depuesto. Finalmente ésta fue expulsada del cielo y sustituida por el quinto y último sol, Tonatiuh. Desde 1987 se celebra el Festival del Quinto Sol.
La Iglesia parroquial de Temoaya es una edificación de atractiva fachada y dos torres de diferentes alturas, en la que se venera al patrono del pueblo, el Apóstol Santiago.
En Temoaya encontrarás varios temazcales en los que puedes dejar que el estrés y las preocupaciones se vayan en el vapor del antiguo baño y cura indígena. Si te decides a dormir en Temoaya, está la Finca La Venturosa que ofrece acogedoras cabañas hasta para 8 personas, un huerto en el que cultivan setas y otras especies para la comida que preparan, zona de camping, riachuelo , es helado, y áreas par entretenimiento al aire libre.
Carretera Temoaya-Centro Ceremonial
55 5799 36 92
Otra Opción es el hotel Casa Grande, en la vía al Centro Ceremonial Otomí, que cuenta con suites con jacuzzi, y habitaciones dobles y sencillas.
Hotel Casa Grande en Temoaya
Temoaya 156 50850 Temoaya Mex.
719 265 0352
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